Retomar la escritura digital

Hola a todos:

Como algunos ya sabéis, esta no es la primera vez que escribo un blog. Empecé un blog por primera vez en 2011 y lo mantuve activo hasta 2017. Lo utilicé para uso personal así como para prácticas profesionales y para aumentar mi marca digital.

Tuve como mentora a Rosa Jiménez Cano. Fue un privilegio contar con su apoyo en aquellos comienzos y entender de manera profunda qué se puede aprender con un blog. Ella misma escribió junto con Paco Polo La gran guía de los blogs en 2008. También me regaló la Huffington Post Complete Guide to Blogging. Todo ello fue meses antes de emprender mi experiencia sudafricana.


Ocho años despues, vuelvo a abrir este blog para reflexionar, entre otros, sobre el uso de la tecnología para la educación. Ciertamente, se puede aprender mucho con y a través del uso de la tecnología. No obstante, creo que sólo debería ser utilizada cuando es mucho más ventajosa que el aprendizaje tradicional o si lo que se puede conseguir con una actividad a través de la tecnología nos va a reportar muchos más beneficios que una actividad tradicional.

Se habla mucho de las nuevas generaciones de nativos digitales. Sin embargo, creo que en el uso de la tecnología como herramienta pedagógica, no son todo ventajas. Utilizo muchas herramientas para aprender y para hacer a mis estudiantes aprender. No obstante, las opiniones no son unánimes cuando se lanzan al aire preguntas como "¿Os ha gustado esta app? ", "Os ha resultado útil hacer estas fichas a través de la plataforma digital?", "¿Qué os han parecido las correcciones que he hecho en los foros?"

En realidad, creo que un equilibrio entre el mundo digital y el mundo analógico es fundamental y, para ello, como profesional, es necesario conocer todas las herramientas a mi alcance, aunque sólo sea para saber cuándo debo y cuándo no debo utilizarlas.






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